Un limbo llamado Saarbrücken.

Nota: Con el Saarbrücken empieza una serie sobre pequeños grandes clubes que hicieron de algún modo historia en el fútbol alemán a lo largo de los años, tanto en la época de los campeonatos federales como tras la creación de la Bundesliga en 1963.

En la primavera de 1943, cuando toda la Alemania futbolistica tenia puestos sus ojos en el viejo estadio de Ludwigspark, donde se iba a dilucidar el nuevo campeón del fútbol alemán, nadie en la región del Sarre se imaginaba que años más tarde, su lander, se jugaría la clasificación para la fase final de un mundial contra su Alemania natal.

El club más popular de la región, el 1.FC Saarbrücken tras ganar el titulo de la Gauliga Südwest, uno de los 16 campeonatos federales existentes en la Alemania Nazi, inició su tercer asalto al titulo nacional. Sus dos anteriores intentos, en los años 20, quedaron frustrados a las primeras de cambio. En esta ocasión, la primera avanzadilla de una generación fantástica de futbolistas, había llevado al club a su primera final, su rival, el equipo más popular de Sajonia, el SC Dresden.

No hubo sorpresa, los aurinegros se impusieron por un contundente 0-3 al Saarbrücken, alzando así su primer titulo. Una decepción que no tuvo posibilidad de revancha, solo un año más tarde, el FC Nürnberg, se cruzaría en el camino del equipo del Sarre, su cuarto asalto al titulo finalizó en los cuartos de final. En aquel año de 1944 el SC Dresden volvería a ganar el titulo por segundo año consecutivo.

Sobre el Saarbrücken dijo Jules Rimet, siendo presidente de la FIFA, que era el club más fascinante de toda Europa. Y no era para menos. El pequeño equipo del Sarre es el único conjunto alemán que posee en sus vitrinas un titulo de campeón de Francia, el de la segunda división. Titulo que consiguió tras superar al Girondins de Burdeos. ¿Como un club alemán logró conseguir el ascenso a la primera división francesa?. Esta es la curiosa historia del FC Saarbrücken, un club que vivió en el limbo durante casi una década.

La ofensiva aliada durante la II Guerra Mundial llevó a ocupar la región del Sarre, siendo esta ocupada por los franceses. La intención de París fue anexionar el lander alemán a su territorio, hecho que en principio consiguió, aunque fuera de forma temporal. Bajo el mando francés, toda actividad deportiva quedó suspendida. Antes de devolver la región a Alemania, el gobierno francés intentó provocar la independencia del Sarre, creando un estado a imagen y semejanza de Mónaco, un enclave bajo tutela francesa. Falló. Tras la posguerra los aliados abandonaron Alemania.

Durante ese periodo de tiempo, 1945-49, el club afrancesó su nombre y se inscribió en la federación francesa de fútbol bajo el nombre de FC Sarrebruck. Primero como invitado, y luego como miembro de pleno derecho, compitió en la segunda división del fútbol francés. Su incursión en tierras galas fue positiva en muchos aspectos, le ayudó a recuperar su estructura, perdida tras la guerra, a mejorar la formación de sus futbolistas, y a retomar entre las gentes de la región la popularidad perdida, un periodo de tiempo que le sirvió para aventajar en mucho a sus ex-compatriotas alemanes.

Pronto el FC Saarbrücken se toparía con el orgullo francés, una piedra de toque, que quizá fue la causante a posteriori del fracaso en los planes soberanistas de París. Tras imponerse con contundencia haciendo gala de un fútbol plástico y atractivo en la segunda categoría del fútbol galo, superando al Girondins de Burdeos con abrumadora claridad, la FFF, se negó, alegando motivos de orgullo nacional, otorgar al club alemán su merecida plaza en la primera división. Esta decisión provocó que el FC Saarbrücken abandonara la federación. Empezó así su travesía por el limbo. Tras su renuncia, esa temporada se dedicó a disputar una serie de amistosos internacionales que le granjearían fama mundial. Viajó a Brasil para imponerse al famoso Sao Paulo FC, empató en Anfield ante el Liverpool (1-1), y tuvo la osadía de golear por 0-4 al Real Madrid en el Santiago Bernabéu, esa seria la única derrota de los blancos en su feudo en un partido internacional durante 12 años.

En el año de 1949 el club creó su propio trofeo, la copa internacional del Sarre, un torneo amistoso que llevaría a 15 clubes europeos a jugar contra el Saarbrücken en su feudo, en modalidad de liga. Destacando entre todas, su victoria por 4-0 al Stade de Reims. Durante tres años el equipo no perdió ni un solo encuentro. En 1952, los clubes de la región decidieron crear su propia federación, federación que fue aprobada por la FIFA, y que organizaría su propia liga, la Ehrenliga, teniendo su propia selección nacional.

El FC Saarbrücken, con 10 jugadores, seria en el club que más jugadores aportó a aquella incipiente selección. Combinado que quedaría encuadrado junto a Noruega y Alemania Occidental en el grupo clasificatorio para el mundial de 1954. La selección del Sarre quedó segunda, con 4 puntos, por detrás de los alemanes. Un buen resultando teniendo en cuenta su peculiaridad. El Sarre solo ganaría 1 partido oficial en su corta existencia, 3-2 a Noruega. Empatando como local contra sus vecinos, la Alemania Occidental, a la postre campeona del mundo en Berna.

La pequeña aventura de la región en la Europa futbolistica no había hecho más que comenzar. Como toda federación reconocida, sus clubes eran miembros de pleno derecho de la UEFA, por lo tanto el campeón de la Ehrenliga, tenia una plaza asegurada en la Copa de Europa de 1956. El emparejamiento fue caprichoso, en la segunda ronda los ex-alemanes occidentales, quedarían emparejados con el campeón italiano. El AC Milán. Como afirmó Herbert Binkel, integrante de aquel equipo: ”Los italianos nos subestimaron, pensaban que nos iban a ganar sin esforzarse”.

El encuentro en San Siro finalizó 3:4 en favor del Saarbrücken. Un hito que hizo que el pequeño club del Sarre, se hiciera famoso en toda Europa. “Al partido de vuelta, vinieron gentes de toda Alemania occidental, en el Sarre aquel día todo el mundo tenia fiesta” Confiesa Binkel en una reciente entrevista con motivo del 55 aniversario de la “no independencia” de la región. Se toparon con la realidad en su propia casa, una contundente victoria por 1-4 de los rosoneros les volvió a poner los pies en el suelo. Tras un referéndum, en 1956 la región volvió a integrarse en la federación Alemana. Los títulos de la Oberliga-Südwest de 1957 y 1961 fueron los últimos grandes éxitos del club.

En 1963 el FC Saarbrücken no se ganó el derecho de participar en la primera edición de la Bundesliga, quedó por detrás del Neunkirchen en la Oberliga-Südwest, habiendo quedado establecido el criterio de selección para la liga unificada solo a los campeones federales. Gracias a la simpatía y mecenazgo con el que contaba el club por parte de Herman Neuberger, presidente de la comisión de admisión de la Bundesliga, el club pudo participar en la nueva división. El FC Saarbrücken tiene el “honor” de ser el primer colista en la historia de la Bundesliga. Tras esa temporada, no volvería a primera división hasta 1976, en la que permanecería solo dos temporadas. 1986 y 1993 han sido hasta la fecha sus ultimas incursiones en la Bundesliga. Tras conseguir el ascenso en la 2010/11 el FC Saarbrücken jugará en la 3.Liga.