Hamburguesas rebeldes.

En el fondo, la eliminación es justa. Hubiera sido un premio excesivo para una plantilla demasiado golfa plantarse en una final y más ganarla. La poca profesionalidad que han demostrado ciertos jugadores a lo largo de este año horrible no merecía tanto premio. A pesar de todo la eliminación del Hamburgo fue cruel. Por segundo año consecutivo los Rothosen se quedan a un paso de la final europea, esta quizá la más deseada por jugarse en casa. Cabe destacar el golazo de Petric desde 30 metros que hizo que durante 80 minutos el HSV estuviera clasificado para la finalísima.

Ahora toca pensar en el futuro, que el Hamburgo vuelva a Europa es complicado, a falta de tres jornadas la clasificación vía liga la tiene cuesta arriba, no depende de si mismo. El fracaso del equipo del diamante para el fútbol alemán tiene otra connotación. Con el Bayern y el HSV en las finales continentales la Bundesliga tendría virtualmente asegurado un cuarto puesto para la champions a partir de 2012. Ahora solo depende del éxito del Bayern en la final para dejar al Calcio sin su cuarta plaza.

El club tiene previsto en las próximas semanas anunciar quien será el nuevo entrenador del equipo para el futuro. En las ultimas horas el nombre de Fatih Terim ha ganado fuerza y parece haber cogido ventaja respecto al grueso de candidatos. No va a ser una tarea fácil sea quien sea el sucesor de Labaddia, las urgencias históricas que padece el HSV son grandisimas, y la presión y el nerviosismo en el Nordbank Arena crecen a medida que pasan los años y no llegan los resultados. A pesar de que el club por tercer verano consecutivo va a perder a sus mejores jugadores, parece que hay intención de tirar la casa por la ventana y apostar definitivamente por un proyecto ganador de perfil alto.